___ Vivo en un mundo de infinitas posibilidades. Aunque no todo intento para desarrollar mi potencial tenga éxito, continúo esforzándome. Aprendo de cada experiencia. Tengo fe y sé que al permanecer atento y proseguir según la sabiduría divina sabré qué hacer. El Espíritu dirige el camino hacia el cumplimiento de mi destino divino. Soy una creación de Dios, lleno de capacidades y potencial que exceden aquello que puedo imaginar para mí.
___ Estoy dispuesto a descubrir y desarrollar mi potencial divino.
Texto devocional: Pero el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza.—Gálatas 5:22-23