___ Cada día me brinda muchas oportunidades para redirigir mi tiempo, mi atención y mi energía. Cuando estoy consciente de los compromisos que he hecho, puedo cumplirlos con mayor eficiencia. Tomo tiempo para pensar antes de elegir y también me doy permiso para decir “no”. Merezco una vida equilibrada que me asegura que podré dar lo mejor de mí —a los demás y a mí mismo.
___ Cuando dedico mi tiempo y energía a las cosas que apoyan mi mayor bien, cumplo con mis compromisos. Si tengo que tomar una decisión difícil o debo decir “no” a algo, confío en que Dios me ayudará.
___ Al cuidar de mí mismo, permito que el mayor bien se desenvuelva —no solamente para mí sino para todos los demás.
Texto devocional: Encomienda al Señor tus acciones, y tus pensamientos serán afirmados.—Proverbios 16:3