OPCIONES:
El amanecer de cada día me presenta posibilidades nuevas. Tengo decisiones que tomar que afectarán de manera positiva o negativa mi vida y las vidas de los demás.
Poder elegir es un don divino. Soy libre para escoger mis palabras y acciones —hasta mi actitud. Me esfuerzo para tomar decisiones sabias que fomenten el equilibrio en mi vida. Lo hago dirigiéndome a la vida divina en mí. Juntos, Dios y yo, tomamos decisiones que profundizan mi paz interna, fortifican mi cuerpo y me permiten expresar más plenamente mi naturaleza divina. Tomo decisiones que promueven finanzas saludables, trabajo exitoso y relaciones personales armoniosas.
Hoy mantengo la intención de ofrecer energía positiva al mundo.
Texto devocional:La lámpara del cuerpo es el ojo; así que, si tu ojo es bueno, todo tu cuerpo estará lleno de luz.—Mateo 6:22